sábado, 22 de agosto de 2015

Buenas noches princesa!!!

Nos encanta hacer fotos de los muebles tal y como los encontramos, desgraciadamente la foto que teníamos se ha perdido para siempre.Pero sí podemos decir que la primera vez que lo vimos se nos pusieron los pelos como escarpias; ese lacado blanco con tapizado capitoné en tela de sky azul de Prusia con relieve de damasco, completamente setentero, roto y sucio.
Nos deshicimos rápidamente de ese maquillaje pasado y raído y al verlo desnudo nos dimos cuenta de lo romántico y maravilloso que era.
Despues te decaparlo y lijarlo , nos encontramos con el primer problema, la estructura central era de aglomerado. Queríamos pintarlo entero, así que tuvimos que darle capas y capas de masilla para madera entre capa y capa, lijamos con una lija de grano muy fino, una vez estuvo preparada, comenzamos a pintar.
Para la fase de pintado, utilizamos un esmalte acrílico, en tono pastel, este proceso es el más lento, ya que tuvimos que aplicar muchas capas y hay que esperar a que seque entre capa y capa. 
Antes de dar la siguiente capa hay que lijar para lo que utilizamos lija de esponja de  grano fino, mojándola con agua para que el acabado quede más fino. En la última mano, diluímos la pintura  con un poco de agua ( hay que extenderla muy bien sin apretar apenas para no dejar marcas de rodillo.)
El rodillo que usamos para este trabajo es  de espuma y os recomendamos que lo compréis  de buena calidad, cuanto mas densa la espuma mejor resultado dará.
Una vez  seco pasamos a  colocar el transfer, buscamos una imagen que nos gustara y en una copistería pedimos una copia ampliada, la impresión debe ser láser, y la imagen debe estar invertida
Recortamos la silueta y aplicamos barniz acrílico mate sobre la superfiecie del dibujo y lo colocamos sobre el cabecero en la posicion que queramos, y lo dejamos secar  8 horas.
Pasado ese tiempo retiramos papel  mojándolo con  agua, usamos los dedos  y frotando lijeramente, vereís como la celulosa comienza a hacer bololitas, no apreteis mucho ni con mucha fuerza porque podeís llevaros parte del dibujo, conviene dejar secar de vez en cuando para ver donde queda papel, que se pondrá blanco.
Acabado este paso hemos dado un barniz acrilico en aerosol a una distancia de unos 30/40 cm para fijarlo bien.

Para la mesita, tuvimos el problema de que las chapas de madera estaba en muy mal estado así que decidimos sustituilas.
Podéis encontrar contrachapado   de maderas distintas, aquí os iremos mostrando la gran variedad que hay, en este caso usamos un resto de madera de haya que teníamos por el taller, en vuestra tienda de maderas cercana os la cortarán a la medida que necesitéis
Una vez nuestra mesita estuvo lista, comenzamos a pintar, utilizando el mismo procedimiento  que usamos para el cabecero.
En el cajón interior decidimos colocar un transfer igual que el del cabecero
Acabamos colocando unos tiradores de cristal y el resultado....